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Si hablamos de storytelling, lo primero que nos viene a la cabeza es contar historias, y como siempre que usamos el sentido común, estamos en lo cierto.
Storytelling es, por definición, el arte de contar una historia. La creación y aprovechamiento de una atmósfera mágica a través del relato.
No creáis que esto del storytelling es algo moderno, la tradición oral lleva siglos sirviendo como hilo conductor de nuestras Historia.
Nuestros negocios tienen una historia detrás, unos aciertos, unos errores y una serie de circunstancias que nos han traído donde estamos hoy.
¿Cuáles son las ventajas de contar historias?
Una historia no sólo cuenta una realidad de manera diferente, muestra un lado diferente. Da a conocer aspectos desconocidos y genera confianza. SI los clientes se fían de nosotros nuestra relación comercial mejora.
Una historia logra plasmar una secuencia y un flujo de hechos, lo que hace que se recuerde fácilmente, de esta manera también se transmite con gran facilidad. Nuestros usuarios interactúan, recuerdan y comparten nuestras propias historias, aquello que queremos que conozcan de nosotros.
Presentar los resultados de nuestra compañía o el último estudio realizado sobre nuestros productos puede ser muy interesante pero si carece de contexto carecerá de interés.
Nos encanta una buena historia y no nos cansamos de escucharlas una y otra vez. Hacen lo complejo simple y dan una dimensión diferente a la cotidianidad.
Crean una conexión profunda y emocional, diferente a todos los demás argumentos funcionales y de desempeño que pueda estar dando a su cliente potencial.
Todos tenemos un corazón. Una historia nos hacen humanos y cercanos. Convierte la imagen fría de una empresa anónima en personas en las cuales se puede confiar.
Compartir quiénes somos, qué hacemos y cómo lo hacemos genera contenido de calidad en nuestra comunicación. No vale contar cualquier historia, el storytelling tiene una estructura y una serie de requisitos, el storytelling no es contar cuentos, más adelante os contaremos cómo construir una buena historia.
Mientras tanto queremos que os quedéis con lo importante, las historias que llegan al corazón venden.
